jueves, 15 de noviembre de 2012

Juan se detiene en el hall del hotel, hace el checking, pide algún medicamento que le alivie ese baile que lleva en sus tripas y se encamina al ascensor, el viaje en el avion  ha sido terrible, su cuerpo se resiente y lo que desea es una ducha caliente y un descanso reparador.

Elisa viste un atuendo veraniego y en sus manos descansa un perrito yorksire, se nota que la cirujia no le da miedo, su piel estirada, los labios enbotoxados,  joyas por doquier  y el chandal con el que viste a su mascota dan la imagen de una mujer frivola a la vez que extravagante.

El es gordo, muy gordo, siempre lo ha sido, el sudor cae por su frente y por sus axilas en forma de chorro, su olor corporal no se puede aguantar, es un hombre de mirada penetrante, su calvicie y su soriasis hacen que la gente intente esquivarlo, se llama Emilio.

Está de vacaciones con sus amigas, tiene una belleza natural, dentadura blanca, ojos con grandes pestañas, unas curvas sensuales, una mirada inocente a la vez que provocadora. Se llama Francoise.

Se abre el ascensor, Juan entra en el y marca el 8, se cierran las puertas y tras mirar de reojo al móvil se mira en el espejo, tiene ojeras. Se detiene en el segundo piso, se abre la puerta y una joven con chancletas y bañador entra, juan se la queda mirando, la saluda educadamente y la observa mientras ella marca el piso en el que está la piscina. En el quinto de nuevo se detiene, se abre la puerta y por un lado una vieja con un perrito diminuto en sus manos entra, también un gordo que lleva una toalla colgada al cuello y un traje de baño diminuto de color berenjena.

El chucho empieza a ladrar, Elisa le pasa la mano por el morro para que se tranquilice, Francoise sonrie de forma fingida, Emilio mira al perro y juan ni se da cuenta, lo unico que quiere es llegar al 8.

Se apagan las luces, un chirrido se escucha , súbitamente el ascensor se detiene, todos se miran con cara de asombro, pasan veinte segundos y empiezan a reaccionar, el perro sigue ladrando, la vieja empieza a estar desencajada, Emilio abre la boca para decir algo (tiene alitosis), a juan le entra un apreton inesperado y francoise empieza a repetir una y otra vez la palabra mierda.

Llaman al botón de emergencia, responde un hombre, se le dice que el ascensor se ha parado, dice que toma nota y que en breve se les rescatará, todos se tranquilizan, juan se sienta encima de su maleta en un rincón, el perro ya se ha callado, Elisa no hace mas que mirar al letrero del ascensor donde dice que el peso maximo autorizado es de 400 kg y Emilio, Emilio no para de hablar de sus negocios, de su empresa de piensos, de sus cerdos, asi el hombre intenta tranquilizarse.

Ya han pasado 45 minutos. Se escuchan voces a lo lejos, parece que los bomberos están trabajando, Juan se ha descompuesto, Emilio ha empezado a llorar, Elisa no para de decir que como se puede ser tan gordo y Francoise ha empezado a perder ese encanto cautivador y se ha transformado en Francisca.

Los bomberos están al otro lado, preguntan cuantos estan atrapados, les dicen que mantengan la serenidad que pronto estarán fuera, con una palanca empiezan a intentar abrir la puerta, el ascensor se ha quedado entre dos pisos, por fin lo consiguen ahora tienen que subirlos , es un metro, les dicen que lo hagan de uno en uno y con tranquilidad.

Francisca dice que ella será la primera y sin que a los demás les de tiempo a reaccionar ya está casi a salvo, ya sin peligro se marcha no sin antes insultar a todo y a todos.

Elisa dice que será la siguiente, Emilio le pregunta porqué mientras Juan sigue en ese rincón hediondo . Consigue a trancas y barrancas salir y no deja de decir que ha sido  la experiencia mas asquerosa de su vida.

Emilio será el siguiente, es dificil izarlo, tras varios intentos fallidos por fin lo consiguen, parece una revalida para los bomberos, en sus caras se observa la sensación de haber hecho bien el trabajo.

El último es Juan, primero su maleta, un bombero al cojerla comenta que huele a rayos, en unos segundos lo sacan de alli y asi ya todos estan fuera, un bombero entra en el ascensor y se encuentra con un can muerto.

Al entrar al comedor Francoise pregunta a Elisa donde está su perro, y Emilio le ofrece unos medicamentos a Juan.